Nombre: Zaroel
Apellidos: Mii
Apodos: “Zar”
Sexo: Mujer
Raza: Humana
Planeta de Origen: Naboo
Sensible a la Fuerza: Sí
Clase: Jedi Sage
Rol: Healer
Estilo de combate: Forma III: Soresu; Usa sus poderes de la Fuerza para combatir antes que
el sable.
Afiliación: República, Orden Jedi, La Mano.
Actitud: Luminosa
Sexualidad: Heterosexual
Pareja: Sin pareja
Habilidades: Conocimientos de botánica y flora en general que aplica para crear
remedios para mejorar la salud, curar heridas, etc.
Poderes/Habilidades especiales: Poderes de la Fuerza básicos, Proteger con la Fuerza, Barrera de la Fuerza
(Campo de Fuerza), Sanar con la Fuerza e investigando lo que posteriormente se
conocerá como “Morichro”.
Personalidad: Muy tímida, vergonzosa e introvertida. Siempre preocupada por la imagen
que pueden tener los demás de ella. Muy insegura (con respecto a sí misma, no
al tomar decisiones). Ha aprendido a controlar su nerviosismo, por lo que es
capaz de hablar sin problemas con la gente en general, pero tiene muchos
problemas para hacerlo con los hombres, soliendo desviar la mirada,
tartamudear, sonrojarse constantemente e incluso (en casos muy extremos) llegar
a desmayarse.
Amable, generosa y gentil con todo el mundo, sobre
todo con los desfavorecidos y los niños.
Trasfondo:
Segunda y
última hija de la familia Mii, una casa Noble de Naboo. Al igual que su hermano
(con el que se lleva 5 años), disfrutó de una infancia acomodada y feliz junto
a su familia. Fue bien instruida en numerosas materias, y a la edad de 8 años
fue enviada a Tython al descubrir que también era sensible a la Fuerza.
Allí, al igual
que su hermano, desarrolló su gran potencial en la Fuerza, y se graduó sin
demasiadas dificultades. Y entonces, al contrario que su hermano, que enfocó
sus poderes y habilidades al combate, Zaroel continuó estudiando la Fuerza
hasta llegar a convertirse en una renombrada sanadora de la Orden. Al contrario
que su hermano que fue tachado de desperdiciar su talento, Zaroel recibió
numeroso encomio por parte del Consejo Jedi al usar su conexión con la Fuerza
de la manera en que lo hizo.
Las labores de
Zaroel eran muy limitadas: desde sanar a algún jedi que llevaran herido o
enfermo a Tython hasta ir como enviada especial a algún planeta en el que se
requiriera su labor. Cuando estalló la Guerra, Zaroel fue enviada a numerosos campamentos
y bases republicanas para encargarse de los heridos y en raras ocasiones entró
en combate. Nunca tuvo problema para hacerlo si era necesario, pero no era
demasiado confiada ni fuerte en los combates con sables de luz, por lo que prefería
no entablarlos. Se sentía más cómoda ayudando con la Fuerza a sus aliados si
tenía que intervenir en algún combate.
En Corellia,
mientras Zaroel ayudaba a los soldados a recuperarse de combates, un
destacamento imperial irrumpió en la base acabando con todos los que encontraban
a su paso. Zaroel comenzó a abatir soldados para proteger así a los malheridos,
pero pronto apareció un imponente sith purasangre que, tras identificarse como
Lord Scaurgy, entabló combate con la jedi. Si bien Zaroel pudo mantenerlo a
raya por unos instantes mediante el uso de la telekinesia y sus campos de
Fuerza, el sith pronto se adaptó a las circunstancias y consiguió llegar hasta
ella, forzándola a entablar combate cuerpo a cuerpo. La asustada jedi, en pocos
segundos se vio abrumada por el formidable estilo de lucha del sith, por lo que
cayó malherida y aterrorizada frente a él. El sith, al verla en aquella
situación, decidió no aniquilarla y llevársela prisionera. Pero Lyn (que
también combatía por aquel entonces en Corellia), habiendo oído del ataque,
acudió a rescatar a su hermana. Su estilo de lucha sorprendió al sith el tiempo
suficiente para poder sacar a Zaroel de allí.
Tras esto, Lyn
pidió al Consejo que éste se abstuviera de enviar a Zaroel al frente, siquiera
para ayudar en labores médicas. Éste se negó, pero ante la amenaza de la
retirada tanto de él como de su hermana de las filas jedi, el Consejo aceptó a regañadientes.
Zaroel pasó a desempeñar labores de pequeña importancia, habiendo incrementado
su inseguridad también. Seguía atendiendo heridos en Tython y, a veces, en
Coruscant.
Nunca tomó un
padawan, viéndose incapaz de instruir a nadie. Pero finalmente, el Consejo accedió
a asignarle una tarea algo más especial: se encargaría de instruir y ayudar a
un grupo de 5 iniciados jedi hasta que tuvieran edad suficiente para
convertirse en padawans y fueran escogidos por un maestro. Cumplió con afán y
dedicación esta labor hasta que finalizó, y después lo hizo con algunos otros
grupos de iniciados.
Durante la
invasión sorpresa de los sith a Tython, Zaroel se las apañó para evacuar a un
gran número de jóvenes jedis, junto a los que consiguió escapar del planeta. Para
ello tuvo que combatir contra algunos sith e imperiales, lo que le infundió
algo de confianza para en el futuro realizar misiones más arriesgadas, como
hacía en tiempos pasados.
Tras la aparición
del Imperio Eterno, y preocupados de que debido a su importancia para la
República, sus gentes sufrieran más daños, ella y su hermano evacuaron a buena
parte de los jedi que había en Tython antes de la invasión Zakuul, para después
contribuir en la de Coruscant. El Imperio Eterno causó estragos por toda la
Galaxia, incluido su planeta natal Naboo. Sus padres fueron asesinados, por lo
que ella y su hermano son lo que ahora queda de la Familia Mii.
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